Opinion:
Hay que reconocer que estas páginas de encuentros cumplen un papel social importante en momentos puntuales en cada persona y aunque todo se quede en una comunicación online en muchos casos nitigan la soledad o en otros pueden elevar el ánimo y ayudar a que la persona pueda sentirse mejor, provablemente en una etapa de vida más o menos difícil.
Defectos:
El fracaso de estas páginas está en la desconfianza y malestar que sobreviene al usuario cuando no necesita de los servicios de contactos sociales y solicita la baja. Estas páginas deben considerar el principio de lealtad y respeto hacia sus usuarios, considerar los cambios en las circunstancias de cada persona (económicos, de una nueva relación, dentro o fuera de la página...., etc.) y facilitar el derecho personal e intransferible a querer estar o irse. Todo lo que no sea respetar este derecho es una agresión a la persona y a su natural derecho a decidir y elegir sobre sus propios actos y sobre su vida, y esto ya es un delito social y no una función social. Gracias por darme la posividad de escucharme.